Es difícil encontrar una persona que haya visitado París y diga que no le ha gustado.
Quizás te digan que estaba algo sucia, que les llovió o que es una ciudad cara pero nadie algo como «Uf ¿París? terrible,no nos pareció nada especial, no volveríamos ni de broma»
La ‘ciudad de amor’ enamora, y eso es así.

Para este post decidí pedir recomendaciones a buenos amigos que han visitado la ciudad (y son de fiar en cuanto a gustos 100%), les he pedido que elijan su zona, restaurante,café favorito o algo que hacer más allá de lo típico.

* Empezamos por Pablo, él vive en Francia relativamente cerca de la capital por lo que la visita con frecuencia.

Nos recomienda la «Rue Mouffetard», se encuentra en una zona poco turística por lo que podréis recorrerla tranquilamente ya que está libre aglomeraciones. Además según me comentó, la calle está llena de restaurantes y cafés. Hay muchas terrazas en las que disfrutar de los rayos de sol que salgan ese día y donde podéis comer una rica raclette o una fondue.

 Bárbara, ha vuelto recientemente de una escapada con su familia a la capital francesa y, además de cientos de fotos, se ha traído muchas anécdotas y unas cuantas recomendaciones bajo el brazo.

¿ Habéis oído hablar de los ‘macaron’ ? No, no son pasta sino unas pequeñas galletas de diversos colores y sabores. Se hacen con clara de huevo,almendra molida y azúcar glas, se unen dos de éstas con una crema entre medias et voilá! tenemos los vistosos macaron.
Bárbara nos recomienda probralos en Ladurée , ya sea en los Campos Elíseos o en Place Vêndome.

En la línea de llenado de estómago continuamos. Para comer cualquier café del Barrio de Montmartre los precios rondan los 25€/persona siendo lo que más encarece la comida la bebida. Sin embargo, para ahorrar un poco podéis pedir agua del grifo, es algo muy normal en París.

Montmartre es conocido por ser el barrio más bohemio de la ciudad, es le barrio de los pintores y en él se encuentra el Moulin Rouge. En la zona más alta, en Place du Tertre, será donde encontréis los mejores sitios para cenar mientras disfrutáis del arte de los pintores.

Otra zona muy recomendable para comer es el Barrio Latino (el nombre viene de la Época Medieval, cuando los habitantes de la zona eran estudiantes que utilizaban el latín para comunicarse). Los precios son asequibles y el Rue Huchette será donde más variedad encontremos.

Bárbara aprovechó el anochecer para subir a la Torre Eiffel de manera que desde arriba se puede ver como se va iluminando la ciudad lentamente y se va convirtiendo en la «Ciudad de la luz» ( este sobrenombre a parte de por su fama como centro de las artes y la educación,se dice que también es por su adopción temprana de la iluminación urbana).

* Por último, y no menos importante, tenemos las recomendaciones de Ángeles (del blog «pues muy rico todo» ) .

Como no iba a ser menos, como buena amante de la gastronomía que es, de lo primero que me habló fue de restaurantes:

  •  «Le Petit Trianon» , en Boulevard Rochechouart 80 cerca de Sacre Coeur. Es una buena opción para cenar en París y además muchas veces tienen actuaciones y teatro para amenizar la visita.
le petit trianon
Et voilá, una pequeña cena de picoteo
  •  «Pot de Terre» es ideal para comer sopa de cebolla con queso gratinado. Según cuenta la leyenda a este local acudían nada más y nada menos que Los Tres Mosqueteros (22, rue du Pot-de-Fer).

Aprovechando un paseo por el Sena se puede ver una de las iglesias más antiguas de París, en el Barrio Latino : Saint-Séverin.

Es una de las más bonitas, pero suele pasar desapercibida al turista, no está a más de 400 metros de la Catedral de Notre Dame pero ésta suele eclipsarla. Vale la pena admirar su exterior y visitarla por dentro.

 

Le Marais

Este barrio y su visita obligada es algo en lo que los tres coinciden.

 Está al lado de La Marie (Ayuntamiento), la zona de Le Marais significa «zona pantanosa» porque antiguamente era todo fango, nada más lejos del actual barrio de moda de la ciudad.
En la zona reside la comunidad judía más grande de Europa, además de conformar el barrio gay de la ciudad.  Este calificativo de zona de moda es lo que hace que tomarse un café sea algo más caro, pero  las calles tienen un encanto especial.
Destacar la Plaza de Los Vosgos , está llena de galerías por lo que si te gusta el arte contemporáneo este es tu sitio. Si quiere ver tiendas y librerías de todo tipo, también.

«Nuestro París»

En cuanto a nuestras recomendaciones, está el pasear al anochecer a la orilla del Sena. Escuchar a los músicos que tocan en la zona tiene un encanto especial.
Acercaos hasta la Torre Eiffel y vedla iluminada mientras disfrutáis de un picnic casero con el pandero sentado ( como decían en Pretty Woman) a sus pies.
Habrá a vuestro alrededor gente de lo más chic, con uvas, vino, tablas de queso … algo más normalito también es válido.

 

Subid por la «parte de atrás» del Sacre Coeur, veréis esta preciosa basílica desde una perspectiva distinta a la típica foto de la escalinata.
De camino podéis hacer una pausa en el café de Amelie «Les Deux Molins», 15 Rue Lepic. No tiene nada especial respecto a otros cafés de París salvo que si ,como a mí, os gusta mucho la película creo que vale la pena parar y tomaros algo.

Una vez en la parte alta de Montmartre buscad la zona de viñedos.  Están en la colina de Butte-Montmartre, esta zona a principios de XIX estaba cubierta de viñedos, casas de campesinos e incluso molinos. Nos pareció muy curioso encontrarnos una viñas en medio del barrio, si tenéis tiempo pasad por allí.

 

 

Y vosotros, ¿ya habéis visitado París? ¿ qué es lo que más os gusto ?
Si todavía lo tienes en tu lista de pendientes, no pierdas la oportunidad en cuanto la tengas porque una vez vayas es probable que quieras volver.

Como le decían a Amelie: «La chance, c’est comme le Tour de France. On l’attend longtemps et ça passe vite. Quand le moment vient, faut sauter la barrière sans hésiter.«