¡ Ya estoy de vuelta ! Después de un tiempo sin poder sacar un hueco para escribir, aquí estamos de nuevo.

Esta vez para llevaros a llenar el estómago con un famoso plato (cada vez más en España) y luego a descansar a la playa. Porque sí, en Japón también hay playas.

Quizás no sea una de sus principales atractivos, pero tras muchos días caminando por sus ciudades no nos vino mal hacer un día de «slow travel». Es decir, ir con calma y parar a descansar sin preocuparnos si nos dejábamos cosas por ver o no.

Tras nuestras primeras impresiones en Osaka (el recorrido por esa ciudad aún lo tengo que reescribir),  nos dedicamos el tercer día a visitar la ciudad de Kobe.

Probablemente , si te gusta la carne, te suene mucho. Últimamente se ha puesto de moda en algunos restaurantes el publicitar la carne que lleva el mismo nombre.

Kobe es una ciudad costera de un millón y medio de habitantes, que se encuentra a media hora en tren de Osaka.

Si tenéis el JR Pass podéis coger la línea JR , el coste sin el pase es de 410¥. Nosotros viajamos en el tren de la línea Hankyu por 320¥. desde la Estación de Umeda hasta Kobe-Sannomiya.

El principal motivo por el que decidimos vistar Kobe fue el probar la carne, pero la ciudad nos sorprendió positivamente y nos gustó. Tiene un aire totalmente distinto a las demás que visitamos, como más occidental.
¿Quizás influenciada por la entrada de más extranjeros al ser ciudad portuaria? Puede que sí, no sé deciros. Pero desde luego el ambiente era distinto.

De hecho, la ciudad tiene un barrio (Kitano) con casas de tipo colonial que agranda más esa sensación de haber cambiado incluso de país. Para nuestra visita a Kobe no habíamos preparado nada, así que nos limitamos a callejear, perdernos por la ciudad, recorrer sus jardines y pasear hasta el puerto.

Algo que no os podéis perder es el barrio chino de Kobe. Se nota muchísmo el cambio cuando entras. Según pasas el arco hay mucho más alboroto, gente ofreciendo comida de los bares, puestos callejeros con sus dependientes gritando etc. ¡Como volver a estar en un mercado de Pekín!

El barrio chino no es muy grande, pero recorrer su calle principal de una punta a otra atestada de gente puede llevarte un buen rato. Por supuesto, no dudé en pararme a comer un dumpling ¡con lo que me gustan!

El puerto de Kobe también es una zona a la que vale la pena acercarse si estás en la ciudad. Tiene varios edificios bastante peculiares, que en su conjunto hacen que la vista de la bahía sea muy curiosa. Puedes subir a la Torre de Kobe y disfrutar de las vistas. Nosotros nos limitamos a recorrer la bahía y hacer tiempo para ir a comer.

¡Qué hambre le estaba entrando a Óscar solo de pensar en su carne  de Kobe!

Como puedes imaginar, en la ciudad hay un sin fin de restaurantes que anuncian esta carne. Unos te darán la verdadera y otros no. Y como no queríamos pringar, decidimos consultar en la web de japonismo y elegir uno de los lugares que recomienda.

Además si quieres saber qué es exactamente la carne de Kobe y la diferencia con el Wagyu , no dudes en leer este artículo ( a nosotros nos aclaró muchas dudas ). Si quieres un resumen: si en España de dicen que te dan Wagyu , probablemente sea mentira.

Este no es un plato barato , y aunque teníamos mucha curiosidad por comer Kobe en Kobe , no queríamos arruinarnos. Así que, nos decantamos por comer en la cadena Steak Land. El precio es más asequible que en otros restaurantes, y aunque quizás el servicio sea menos exquisitio, nos valió de más para disfrutar de la carne.

El restaurante se encuentra justo a la salida de la estación de Kobe y se forma bastante cola. Sin embargo, nosotros tuvimos la suerte de que como nos despistamos un poco con la hora al estar paseando por la ciudad … llegamos algo tarde. Eran algo más de las 2 y ya estaban a punto de servir a las últimas mesas, así que para agilizar el proceso nos llevaron a los 10 últimos de la cola a otro local cercano y entramos sin esperar. Y allí estaba en medio del salón, la estatua de bronce que certifica que no nos la estaban colando.

Las mesas tienen un plancha, eliges lo que quieres y lo preparan delante de ti. En cada mesa comen 6 personas.

Tienen varias opciones, a la carta o menú. Y nosotros elegimos un menú de carne de Kobe y otro de carne japonesa «normal». Para compararY la diferencia es abismal. ¡ El Kobe se deshace en la boca ! Pero aún así la normalita estaba deliciosa también.

El precio del menú Kobe es de 4800¥ y el normal 2500¥. El menú incluye bebida, arroz ( o pan, que resulta ser un croissant) ,  verduras a la plancha, sopa de miso y café. No te preocupes, con hambre no te quedas.

 

Para terminar el día, y hacer la digestión. Nos acercamos a la playa de Suma a 15 minutos en tren de Kobe.

Al ser junio no estaba muy llena. Al parecer, a partir de julio les cuando las playas en Japón se llenan al comenzar a hacer distintos festivales.

Pero … ¿desde cuando que una playa esté vacía es un problema?

Así que allí nos fuimos, a darnos un chapuzón  y descansar. La playa está junto a la estación (como podéis ver en la foto) y tiene varios bares donde poder tomar algo. Además cuenta con baños y duchas, muy bien preparada.

Si os apetece hacer un parón en el camino y echar una siesta «post- carne de Kobe», este es un sitio estupendo.

Desde la propia estación de Suma se puede coger un tren directo rápido hasta Osaka. Tienes que estar atento a la pantalla, para no coger el normal que hace muchísimas paradas. Así, con el express estarás en 40 minutos de vuelta en Osaka St.

Si en tu viaje a Japón, quieres descansar  o hacer algo diferente que no suele salir en los circuitos… Kobe y su playa son una buen opción ¿no?

¡Hasta la próxima viajeros!
(espero tardar menos esta vez).